El parrandero

Formato: LP
Año de edición: 1989

Estudio de grabación: Manzana
Número de temas: 10

  1. El parrandero
  2. ¡Tinguili, Tinguili…!
  3. Habanera al emigrante
  4. Popurri a Fuerteventura
  5. Romance sentencioso
  6. Parranda santacrucera
  7. Seguidillas y saltonas
  8. Romance del silbo gomero
  9. Canción-habanera
  10. San Borondón

Tras la edición de dos trabajos discográficos dedicados, específicamente, al folclore musical de la isla de La Palma el primero (“Décimas del Grafiano”) y las canciones y retahílas infantiles el segundo (“Cancionero Infantil Popular Canario”), Verode aborda la tarea de grabar este nuevo disco, que hace el número cinco de los editados hasta la fecha. Y que lleva el título de “El Parrandero” extraído de uno de los temas del propio LP. En este trabajo se contiene un variado repertorio de canciones reflejo de la diversidad de que goza el cancionero canario de raíz popular folclórica. Las canciones de parranda con ritmos de isas, que evocan la fiesta, el jolgorio el cantar y el tocar… están representadas en temas como “Parranda santacrucera”, que además recuerda a un plantel de personajes populares de Santa Cruz de Tenerife, o el ya aludido “El parrandero” que da nombre al disco.
El romancero cuenta también con algunas muestras en esta grabación: “Romance sentencioso”, con textos recopilados por Pérez Vidal en la isla de La Palma, y el “Romance del silbo gomero” que está dedicado al folclore, las gentes y el paisaje de la isla de La Gomera. La emigración y sus influencias musicales en Canarias están presentes en la “Habanera del emigrante”. Y lo mismo el cancionero infantil con una retahíla musicada bajo el título de “Tinguili, tinguili…”. La canción “San Borondón”, con letra de Pedo J. Pérez y música de romances, trata de la mítica isla del mismo nombre, de la que nos hablan las crónicas más antiguas. A los peculiares estilos de isa y polca de la isla majorera está dedicado en el tema “Popurri a Fuerteventura” que termina con un fragmento de que canción que a ella ha compuesto “Los Huaracheros”. Y, por último completan el disco unas “Seguidillas” interpretadas al estilo de Tenerife, y las obligadas saltonas, y una “Canción habanera” cuyo texto lo forma un puñado de coplas entresacadas del abundante cancionero canario del amor.